Cuando se aprende algún arte de manera empírica la posibilidad de aprender “vicios” en su ejecución es muy alta, por ejemplo, quienes hemos aprendido a tocar guitarra con simples manuales carecemos de técnica y esos vicios, se perciben cuando interpretamos el instrumento.

Este libro es la constatación de que en el momento de aprender a servir necesitamos la ayuda de la Iglesia y de los hermanos, instrumentos del Espíritu del Señor. Intentar vivir nuestro bautismo en soledad ya es un “vicio”, como los que aprendemos a la hora de tocar guitarra de forma autodidacta.

Esta obra es una interesante compilación de la enseñanza de la Iglesia para mostrarnos el arte de servir como el Señor Jesús, es decir, dando la vida.

Fr. Iván Garzón, Op. Maestro de Estudiantes.  Provincia San Luis Beltrán (Colombia)